Los quiroprácticos pueden tratar las siguientes condiciones: dolor de espalda, dolor de cuello, dolor de cadera, ciática, dolor de rodilla, dolor de hombro, dolores de cabeza, congestión de los senos nasales, dolor de pie y tobillo, hernias de disco, síndrome del túnel carpiano, dolor de espalda relacionado con el embarazo, dolor de muñeca y codo, y mucho más.